Introducción.

Lisboa es la capital de Portugal, diferentes teorías giran en torno al porque de su nombre, podría venir del nombre fenicio Allis Ubo pero también, según la corriente preromana Lisboa viene de Tajo antes conocido como Lisso o Lucio por último también se especula que la capital adoptó este nombre a raíz de la historia griega de Ulises.

Geográficamente situamos esta ciudad al oeste del país, junto al Océano Atlántico, en la desembocadura del río Tajo y delimita con las ciudades de Loures, Odivelas, Amadora y Oeiras. La demografía de esta ciudad es de 564.477 habitantes según el censo de 2001, el área metropolitana cuenta con 2.641.006 habitantes en una extensión de unos 3000 km cuadrados. Otros datos importantes son por ejemplo, que Lisboa es una ciudad que cuenta con un PIB superior a la media europea, además la mayoría de las multinacionales se encuentras en la capital y es una zona altamente industrializada. A nivel educativo es una ciudad que cuenta con tres universidades públicas ( Universidad de Lisboa, Universidad Técnica de Lisboa y Universidad Nueva de Lisboa ) y dos centros privados ( Universidad Católica Portugesa y ISCTE ), a pesar de ello ninguna de sus universidades aparece incluida entre las cien primeras a nivel mundial. Sin duda la capital destaca por algunos de sus monumentos de los que hablaremos en profundidad más adelante.

Ruta de Monumentos

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El Elevador de Santa Justa.

El Elevador de Santa Justa, o Elevador do Carmo, es un ascensor cuyo diseñador fue Raoul Mesnier de Ponsard y cuyo constructor fue Louis Reynaud para la construcción de este edificio se utilizaron técnicas que aparecen también en Francia en la Torre Eiffel a pesar de que, en teoría no existe relación entre el constructor de este monumento Gustave Eiffel y los otros dos anteriormente nombrados.

La contrucción del ascensor terminó finalmente el 6 de noviembre de 1907 cuando su maquinaria, antes de vapor, comenzó a funcionar con motores eléctricos. El Elevador de Santa Justa tiene ademas una estructura enteramente de hierro, en cada uno de sus niveles podemos encontrar distintos estilos decorativos, en los que predomina el estilo neogótico. El último nivel desemboca en una terraza desde dónde se pueden apreciar otros monumentos de la ciudad como el Castillo de San Jorge.

Los dos ascensores internos son de madera y tienen capacidad para aproximadamente 24 personas, también es importante destacar la escalera de caracol que permite el acceso a la terraza.
Es importante destacar que la estrucutura de el Elevador a perdido su función de medio de transporte, a pesar de que une los barrios Baixa Pombalina y Chiado, pero es la estación de metro Baixa - Chiado la que realmente junta los dos barrios mediante un sistema de escaleras mecánicas que pueden ser utilizadas sin billete.

El Elevador de Santa Justa destaca entre otros que también hay en la ciudad ( el Elevador da Gloria o el Elevador da Bica ) por ser el único configurado como ascensor urbano vertical.

HORARIOS:
De 7:00 a 21:00 última subida a las 20:45.
PRECIOS:
1,40 por trayecto, son válidos los abonos de transporte.

El Castillo de San Jorge

Primitivamente conocido simplemente como "Castelo dos Mouros", se yergue en posición dominante sobre la más alta colina del centro histórico, proporcionando a los visitantes una de las más bellas vistas sobre la ciudad. El recinto del castillo cuenta con aproximadamente 6000 m². El castillo defiende la antigua ciudadela árabe, o Alcázar, abriéndose en sus muros con almenas doce portones, siete de ellos por el lado de la iglesia de Santa Cruz do Castelo. Por el exterior, un paño de muralla da acesso a una torre barbacana. Dieciocho torres de sustentación refuerzan los muros. Por el Portal Sul, a través de la Rua de Santa Cruz do Castelo, se accede a la Plaza de Armas. Historia: El el contexto de la Reconquista cristiana de la península Ibérica, tras la conquista de Santarém, las fuerzas de Alfonso I de Portugal (1112-1185), con el auxilio de los cruzados normandos, flamencos, alemanes e ingleses que se dirigían a Tierra Santa, atacaron contra esta fortificación musulmana, que capituló tras un duro cerco de tres meses (1147).

Rezan las tradiciones que el caballero Martim Moniz, que se destacó durante el cerco, al ver una de las puertas del castillo entreabierta, sacrificó su propia vida al interponer su propio cuerpo en el vado, impidiendo su cierre por los moros y permitiendo el acceso y la victoria de sus compañeros.

Como muestra de gratitud, el castillo, ahora cristiano, fue colocado bajo la invocación del mártir San Jorge, a quien muchos cruzados profesaban devoción. Pocas décadas más tarde, entre 1179 y 1183, resiste con éxito a las fuerzas musulmanas que asolaron la región entre Lisboa y Santarém.


A partir del Siglo XIII, al convertirse Lisboa en Capital del reino (1255), el castillo alberga el Palacio Real.
Tras la conquista de Lisboa en 1147, el rey Afonso Henriques decidió convertir la cima de la colina en la residencia de la Familia Real portuguesa. Se levantó por tanto el Castillo de São Jorge ( Castillo de San Jorge ). Siglos después, en 1511 el rey Manuel I decidió construir un palacio más lujoso en el solar de la actual Praça do Comercio y destinó el Castelo de São Jorge a las funciones de prisión, teatro y almacén de armas.
El terremoto de 1755 deterioró las murallas del castillo hasta su reconstrucción, en época de Salazar, que reformó el Castillo haciendo zonas ajardinadas.
Dentro de las murallas, además del castillo, queda una ciudadela que hoy puede ser visitada ( barrio de Santa Cruz ). El acceso al propio recinto del castillo se hace adquiriendo en una oficina exterior señalizada la entrada y presentándola en el acceso. El paseo por la ciudadela es libre.



Horario de visita
Desde noviembre hasta febrero: de 9:00 a 18:00 horas.
Desde marzo hasta octubre: de 9:00 a 21:00.

Precio
Adulto: 5€.
Estudiantes: 2,50€.
Menores de 10 y mayores de 65 años: entrada gratuita.
Lisboa Card: 30% de descuento.

Transporte
Tranvía: Miradouro Santa Luzia, línea 28.
Autobús: Castelo, línea 37.
Terremoto de Lisboa 1755

La Torre de Belém

La torre de Belém, es obra de Francisco de Arruda y constituye uno de los ejemplos más representativos de la arquitectura manuelina. En el pasado sirvió como centro de recaudación de impuestos para poder entrar a la ciudad.
Su construcción fue iniciada en 1514, bajo el reinado de Manuel I de Portugal (1495-1521), teniendo como arquitecto a Francisco de Arruda. Sus obras quedaron a cargo de Diogo Boitaca, que, en la época, también dirigía las ya adelantadas obras del vecino Monasterio de los Jerónimos de Belém. Las obras finalizaron en 1520.
Se encuentra situada en la desembocadura del río Tajo, en el barrio de Santa María de Belém de esta ciudad al suroeste de Lisboa.

El monumento tiene las influencias islámicas y orientales, que caracterizan el estilo manuelino y marca el fin de la tradición medieval de las torres de homenaje, formando uno de los primeros baluartes para artillería en Portugal.
Parte de su belleza reside en la decoración exterior, adornada con cuerdas esculpidas en piedra, galerías abiertas, torres de vigilancia en estilo mozárabe y almenas en forma de escudos decoradas con esferas armilares, la cruz de la Orden de Cristo y elementos naturalistas, como un rinoceronte, alusivos a los descubrimientos en ultramar. El interior gótico, localizado bajo el piso inferior, sirvió como armería y prisión y es muy austero.
Su estructura se compone de dos elementos principales: la torre y el baluarte. En los ángulos del piso inferior de la torre y del baluarte, sobresalen garitas cilíndricas coronadas por cúpulas con forma de gajos de naranja, ricamente decoradas en cantería de piedra.
La torre cuadrangular, de tradición medieval, se eleva cinco pisos por encima del baluarte.

La nave del baluarte poligonal, ventilada por un pequeño claustro, tiene dieciséis aberturas para cañoneras de tiro rasante. El terraplén, guarnecido por almenas, constituye una segunda línea de fuego, estando localizado en el Santuario de Nuestra Señora del Buen Suceso, patrona del lugar, también conocida como la Virgem do Restelo.

Horario de visita
De Octubre a Abril esta abierto de 10 a 17 horas
De Mayo a Septiembre esta abierto de 10 a 18:30 horas

Precio
Adultos : 4 euros
Mayores de 65 años: 2 euros
Tarifa joven: 1,60 euros
Menores de 14 años : gratis

Transporte
Tranvía: línea 15.
Autobús: líneas 27, 28, 29, 43, 49, 51 y 112.

El monasterio de los Jerónimos

El Monasterio de los Jerónimos, o Mosteiro dos Jerónimos en portugués, fue un encargo del Rey Manuel I para celebrar el Descubrimiento de la ruta marítima de Vasco de Gama ( y de hecho fue financiado con los tesoros traídos de las colonias ). La ideó como el lugar donde iba a ser sepultado él y sus descendientes. Se inicio la obra en 1502, sin que pudiera acabar su primer arquitecto, Diogo de Boitaca. No pudo ser finalizada hasta finales del XVI. Hoy observamos que el ala occidental y la cúpula - campanario, que fueron terminados en el siglo XIX, no guardan armonía con el conjunto.

La entrada del Monasterio, denominada Portada del Mediodía es puro manuelino. Tiene reminiscencias del plateresco español.

El horario de la capilla se extiende de 10 a 17 y cierra los lunes. Su exterior es mucho más suntuoso que su interior. Vasco de Gama yace enterrado en lugar de honor al lado de Luís de Camões, el poeta más conocido de Portugal.

El patio central del Claustro, la joya del edificio, ha descubierto sus tesoros con las recientes restauraciones y podemos ver la historia del José bíblico en azulejos y las tumbas de heroes nacionales como el navegador Vasco da Gama y el poeta Luís de Camões.

De forma cuadrangular y dispuesto en dos plantas, el claustro está completamente decorado con motivos manuelinos: esferas armilares, cuerdas marineras, cruces de la Orden de Cristo, imágenes religiosas. Desde 1985 se encuentra en el ala norte la tumba del famoso poeta Fernando Pessoa.

El monasterio se levantó en el barrio de Belém, lugar de donde partieron las primeras expediciones a las Indias.

En una extensión construida en 1850 está el Museo de Arqueología, el Museo de Marina se encuentra en el ala oeste.

Horarios de visita

De Octubre a Abril: De 10 a 17 hs.

De mayo a Septiembre: De 10 a 18 hs.

Cerrado lunes y feriados nacionales: 1 Enero, Domingo Pascua, 1º Mayo y 25 Diciembre

Precio de la entrada (gratuita a la iglesia)

General: 4,50€ para claustro y dependencias.

Jóvenes entre 15 y 25 años: 2,25€

Menores de 15 años: Gratuita

Gratuita para público en general los domingos y feriados hasta las 14 hs.

Transporte

Tranvía: línea 15.

Autobús: líneas 727, 28, 729, 751, 714.

El Convento del Carmen

La iglesia del convento, que era la mayor iglesia gótica de la ciudad, quedó en ruinas debido al "Terremoto de 1755" y es uno de los principales recuerdos del desastre que asoló la capital portuguesa.

Fundada por el político y militar Nuno Álbarez Pereira para acoger a la orden de las carmelitas, tardó 34 años en construirse (de 1381 a 1423).

La fachada de la iglesia del convento tiene un portal de varias arquivoltas lisas con capiteles decorados. El rosetón de la puerta principal también está destruido y la fachada sur de la iglesia está sustentada por cinco arbotantes aque se adicionaron en 1399.

El interior presenta tres naves y una cabecera con una capila, adicionados em 1399. La peculiaridad de la iglesia es que al estar semiderruida no tiene techo, el techo de la nave de la iglesia desapareció con el terremoto, sólo los arcos transversales que lo sujetaban están visibles a día de hoy, forman parte de los pocos restos de la época medieval que se conservan en Lisboa.

El Terremoto de Lisboa (1755)

El terremoto de Lisboa de 1755 tuvo lugar el 1 de noviembre de 1755, a las 09,20 horas. Causó la muerte de entre 60.000 y 100.000 personas.
El seismo fue seguido por un maremoto y un incendio, causando la destrucción casi total de Lisboa. El terremoto acentuó las tensiones políticas en Portugal e interrumpió abruptamente las ambiciones coloniales de Portugal durante el siglo XVIII.

El acontecimiento fue discutido extensamente por los filósofos ilustrados europeos, inspirando progresos importantes en la teodicea y la filosofía de lo sublime. Además, al ser el primer terremoto cuyos efectos sobre un área grande fueron estudiados científicamente, señaló el nacimiento de la sismología moderna.

Los geólogos estiman hoy que la magnitud del terremoto de Lisboa sería de aproximádamente un 9 en la escala de Richter, con su epicentro en un lugar desconocido en algún punto del océano Atlántico a menos de 300 km de Lisboa.

Revolución de los Claveles.

La Revolución de los Claveles quizás sea uno de los más importantes acontecimientos que han ocurrido en Portugal, ya que provocó la caída de la dictadura salazarista vigente en Portugal desde 1926. El 25 de abril de 1974 en la radio sonó una canción prohibida por el régimen era la señal que utilizó la MFA ( Movimiento de Fuerzas Armadas o Movimiento das Forzas Armadas ) para ocupar los puntos estratégicos del país.

Este acontecimiento fue bautizado como la Revolución de los Claveles por la marcha organizada de militares sublevados que llevaban con ellos armas, en cuyos cañones había claveles, la flor de la temporada. A pesar de ser una manifestación incruenta murieron cuatro civiles a manos de la policía política.

Esta revolución fue consecuencia de los problemas coloniales que existían con distintas colonias africanas, las desigualdades sociales y la explotación latifundista del campo. Sus consecuencias fueron el fin de la dictadura, la liberación de presos y el exilio de los opositores, además de solucionarse los problemas existentes en la sociedad portuguesa. Hoy en día el 25 de abril es una fiesta nacional y en la constitución portuguesa que surgió a raíz de la revolución siguen vigentes estas palabras: ''de abrir la senda hacia una sociedad socialista, dentro del respeto a la voluntad del pueblo portugués y con vistas a la construcción de un país más libre, más justo y más fraterno.''

Lisboa, tan lejos y tan cerca...

...un paseo por la ciudad.

Empezar la visita por la maravillosa torre de Belém. Ya dentro de la ciudad encontraremos el monumento de los jerónimos.

Aunque en algún momento te encuentres desubicado, tranquilo, es quizás la mejor manera de conocer sus rincones

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El elevador de Santa Justa es conocido como el tranvía de los cielos ya que en tan solo 5 segundos tendrás unas vistas que son como estar en el cielo.

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Si hay un hecho histórico que ha marcado la historia de Portugal en las últimas décadas, fue el golpe militar que tuvo lugar en 1974 contra la dictadura de Salazar y es aquí en la plaza del Rossio donde fue bautizado con el famoso nombre de la revolución de los claveles gracias al papel que jugaron en aquel momento las vendedoras de flores que todavía hoy en día ocupan un lugar destacado en esta plaza.

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Hay que destacar, sin duda, uno de sus cafés, a brasileira, punto de encuentro de la intelectualidad lisboeta durante los años 20.

El rinoceronte de la Torre de Belém

Son muchos los detalles e historias que pueden comentarse sobre la Torre de Belém pero hay uno que resulta de gran peculiaridad y que, sin embargo, suele pasar desapercibido para muchos visitantes. Se trata del rinoceronte.

Según cuenta la historia, el tal rinoceronte, conocido con el nombre de Ganda, fue un regalo para Alfonso de Alburquerque, entonces gobernador de la India portuguesa, quien no supo muy bien que hacer con el animal. Así decidió finalmente regalárselo al Rey Manuel I. Esto sucedía a finales del año 1514, año en el que comenzó la construcción de la Torre de Belém.

El rinoceronte no llegaría a Portugal hasta el año siguiente y su llegada supuso todo un alboroto entre la población, realizándose numerosas fiestas en su honor. Hay que tener en cuenta que no se veía tal ejemplar en Europa desde el siglo III antes de Cristo.

Su fama iba en aumento y traspasaba las fronteras portuguesas hasta el punto de querer presentar a Ganda en Roma, antes el entonces Papa León X. Desgraciadamente en este viaje una tempestad acabó con la vida del rinoceronte camino a Italia.

Ahora, uno de los trocitos de piedra de la Torre de Belém recuerda al extraordinario Ganda con el paso de los años.

Gastronomía.

En Lisboa la gastronomía está influenciada por su proximidad al mar, los platos mas conocidos de esta ciudad son las pataniscas de bacalhau, que emplea como ingrediente principal el bacalao en salazón en forma de buñuelo, este plato proviene de Estremadura. Se dice que los lisboetas tienen 365 formas de cocinar el bacalao una por cada día del año. Por otro lado otro plato típico de la gastronomía lisboeta son los peinxinhos da horta, que son bolitas fritas de habichuelas.

El postre más famoso de Lisboa son los Pasteles de Belém (Pastéis de Belém), se trata de unos bollitos de crema y hojaldre cuya receta es secreta y no ha sido desvelada en doscientos años y que en teoría sólo tres personas en el mundo conocen. Son elaborados en la fábrica mas antigua que se encuentra en la fregresía de Belém.

Fiesta popular

Las Fiestas en honor a San Antonio, el casamentero, se celebran en distintos países del mundo, sin embargo, una de las festividades más destacadas es la que se realiza en , dado que San Antonio es su Patrón.

Y no es para menos, pues, San Antonio, en vida fue un teólogo portugués nacido en 1195 y su nombre de pila era Fernando de Bulhöes. Luego recogió el nombre de San Antonio del glorificado San Antonia Abad, y hasta la actualidad se dió a conocer con el nombre de San Antonio de Padua (ya que Padua fue el sitio en el cual finalmente murió).

La Fiesta en su honor tiene lugar los días 12 y 13 de junio y todos los años se espera con gran alegría, sobre todo para aquellas mujeres que lo adoran con el fin de encontrar el compañero de su vida.

Lisboa es de por sí, una ciudad bellísima y llena de misterios e historia, pero para estas fechas se decoran las calles y locales especialmente en un marco fantástico.

A causa de ello los pregones que resuenan en la ciudad poseen un contenido único en tono de plegaria al Santo. “Conseguir un marido” es una misión aparentemente difícil, sin embargo, San Antonio parece que ha conseguido tener éxito más de una vez y de ahí su gran veneración.

En esta fiesta tradicional se llevan a cabo, además, desfiles muy vistosos, marchas por la ciudad en medio de cánticos y bailes, donde la gente participa con gran alegría y esperanza.

El fado.

La palabra fado proviene del latín fas, fatum sinónimo de destino, surge alrededor de la primera mitad del siglo XIX. El fado es la expresión más conocida internacionalmente de la música portuguesa reconocida a nivel mundial, es un canto con el cual se expresan los malos momentos de la vida cotidiana.
Habitualmente canta una única persona acompañada de una viola (también conocida como guitarra portuguesa). Este canto trata temas como la melancolía, la nostalgia o pequeñas historias de la vida cotidiana en barrios humildes, pero los temas estrella son la frustración y el fatalismo. A pesar de ser protegido por las instituciones oficiales y catalogado como espectáculo turístico la popularidad del fado ha ido disminuyendo entre otras cosas, por su erronea asociación con la época salazarista.

En Lisboa el fado se canta en las ''casas de fado'' por hombres y mujeres, destacan las casas de los barrios de Alfama, Mouraia, Barrio Alto y Madragoa, en este caso los temas principales son la tristeza y el dolor pasado o presente aunque en ocasiones se puede contar una historia divertida con ironía una de sus máximas representantes es Amália Rodrigues.

Tranvías

La circulación de los primeros tranvías arranca en Lisboa en 1873, cuando los hermanos Luciano y Francisco Cordeiro de Sousa obtienen los derechos de implantación de un sistema de transporte de tipo americano, denominado "Viação CarrilVicinal e Urbana a Força Animal", un tranvía rudimentario empujado por caballos. El 17 de Noviembre, del mismo año, entraría en servicio la primera línea de los "Americanos" entre la Estación de Sta Apolónia y Boa Vista en Santos.

Este medio de transporte adquirió rápidamente un gran éxito, por lo que aparecio la necesidad de mejorar el servicio, mejorando la rentabilidad y eficacia de los vehículos de tracción animal. En 1877 se iniciarían los estudios informativos para implantar sistemas más eficaces como eran las locomotoras de vapor que empezaban a surgir. El banco de pruebas de los primeros tranvías a vapor se realizó entre Cais de Sodré y Algés. Sin embargo, la mayor revolución llegó en 1900 con la primera implantación de los motores eléctricos que cambiarían definitivamente los tranvías con la llegada de vehículos eléctricos, así como la fisonomía de las calles que estarían llenas de cables aéreos. En 1901 se iniciaría la circulación de los primeros eléctricos, de nuevo entre Cais de Sodré y Algés, levantando gran expectación por la elegancia de los nuevos tranvías, la comodidad y la rapidez de la circulación.

Durante la primera mitad del siglo XX continuaría la expansión de los tranvías eléctricos por toda Lisboa, cuyos vehículos eran adquiridos en los Estados Unidos. El comienzo de la decadencia del tranvía comenzó con la implantación masiva, a partir de la segunda mitad del siglo XX de los autobuses, que acabarían substituyendo a la mayoría de líneas de tranvías, en zonas como Rossio, Benfica, Carnide o Lumiar. La política de la compañía Carris era clara: substitución a corto plazo de los eléctricos por autobuses, la implantación del nuevo transporte subterráneo, y la mayor demanda en transporte público que lastraban al ineficiente tranvía.

En la década de los 90 llegaría la renovación de parte de la flota de tranvías en las líneas que quedaban en circulación, con la adquisición de 10 tranvías articulados que aumentaban considerablemente la capacidad de este medio de transporte, así como ofrecían mayor comodidad y modernos equipamientos electromecánicos.

Transportes Lisboa

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Leyenda del Gallo de Barcelos

La leyenda del Gallo de Barcelos cuenta la historia de un peregrino gallego que salía de Barcelos (ciudad portuguesa del distrito de Braga) camino de Santiago de Compostela, y que fue acusado de haber robado la plata a un terrateniente, por lo que fue condenado a la horca. Como última voluntad, pidió ser llevado por última vez ante el juez, que se encontraba comiendo un pollo (un gallo) asado. El peregrino le dijo que, como prueba de su inocencia, el gallo se levantaría y se pondría a cantar. El juez echó el plato para un lado e ignoró las palabras del hombre.

Sin embargo, en el preciso momento en que el preso estaba siendo ahorcado, el gallo se levantó y cantó. El juez, habiéndose dado cuenta de su error, echó a correr hacia la horca y descubrió que el gallego se había salvado gracias a un nudo mal hecho.

Según la leyenda, el gallego volvió años más tarde para esculpir el crucero del Señor del Gallo que ahora se encuentra en el Museo Arqueológico de Barcelos.